Este pequeño lagarto se distribuye en todo México, Centro América y sur de Estados Unidos y ha ido extendiendo su presencia a otras regiones de clima húmedo y caliente; donde ahora es frecuente encontrarlo en lugares y casas donde prácticamente pasa desapercibido, algunos lo consideran asqueroso y una plaga, pero la verdad es que hay muchos mitos y falsa información a su favor y en su contra.

Mide de 7 a 15 cm de largo y los machos son más grandes que las hembras; tiene un escamado uniforme, con escamas agrandadas en la parte posterior y escamas en bandas en la cola. La coloración puede ser gris o marrón claro a beige y es blanco en la parte inferior; en ocasiones parece ser semitransparente. Tiene enormes ojos con pupilas verticales.

Es habitante común en muchas regiones y está muy bien adaptado a la depredación de insectos que encuentra a lo largo de las paredes de los edificios y cerca de la iluminación artificial, es un gran depredador de la mayoría de las especies nativas de lagartijas.

Esta especie de reptil fue introducida a América proveniente del Suroeste Asiático  (India, Malasia y Tailandia); tiende a ser más agresiva y dominante, más territorial, es poco tolerante a la convivencia y a la competencia.  Aunque no es venenosa, es una especie invasora peligrosa y una amenaza para las especies nativas de lagartijas y sus ecosistemas.

Es ovípara y la reproducción ocurre durante todo el año en ambientes tropicales y es estacional en condiciones más frías. No se auto fecunda como algunos creen; las hembras pueden almacenar esperma funcional hasta un año y ponen dos huevos por puesta. Los adultos viven hasta 5 años.    

Un estudio, del cual se informa en la revista “American Scientist”, ha revelado que las patas de estos pequeños reptiles tienen una capacidad de adhesión tan grande que podrían soportar un peso miles de veces superior al del propio animal.

Es una ávida cazadora nocturna y una oportunista que se alimenta de una amplia variedad de insectos y arañas; también es conocida por consumir juveniles de su misma especie. Su “canto” tiene una función tanto territorial como de cortejo y es un sonido cotidiano que delata su presencia fácilmente.

Donde se ha introducido, los investigadores han demostrado que este lagarto ha sido responsable del desplazamiento competitivo de otras especies de gecos de tamaño similar o menores, en los entornos urbanos como en los suburbanos.

© 2014 Texas Invasive Species Institute.

Lamar University (http://www.lamar.edu/) | Sul Ross State University (http://www.sulross.edu/) | Texas State

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