Trajes típicos o regionales de México
En México, el uso de trajes típicos o regionales no sólo habla de la historia de la cultura indígena, sino de la influencia europea luego de la llegada de los españoles, lo que logró la creación de atuendos llenos de color, carácter e identidad.
El traje típico de México está hecho por manos mexicanas con gran dedicación y delicadeza, y cada uno porta con elegancia elementos que simbolizan el estado que representa y que los hace únicos en el mundo.
Te presentamos algunos trajes típicos que demuestran que el campo también se lleva puesto, al combinar entre bordados diferentes flores y cultivos propios de la entidad.
Baja California Sur
Conocido como la “Flor de Pitahaya”, el traje típico de este estado fue creado en 1951. Se compone de una blusa blanca de manga corta, cuello amplio con una tela que sobresale en forma de “v”; la falda es de color rojo, amplia y decorada de grandes flores blancas enlazadas por una red de cactus.
Campeche
El origen del traje regional campechano proviene de los tiempos de la Nueva España, se dice que surgió cuando las patronas les regalaban a sus empleadas trajes cuatro veces al año, “huipiles” y faldas de zaraza. Las blusas de los huipiles se bordan con flores de cebolla y calabaza.
Chiapas
Se conoce desde la época de la conquista y aunque ha sufrido diversos cambios desde entonces, hoy se reconoce el de flores grandes en el negro del traje. Consta de una blusa con escote semi circular y con los hombros al aire y la falda amplia y larga, ambas de satín y con flores bordadas donde predominan las de color azul, naranja, blanco y rosa. Se dice que el traje refleja en el fondo lo negro de la selva y las flores coloridas recrean la majestuosidad de la flora del estado.
Yucatán
Se cree que los mayas desde la época prehispánica ya hacían bordados a mano, un ejemplo es la vestimenta regional yucateca conocida como el terno. Se dice que elaborar un típico terno tarda alrededor de seis meses, ya que se busca que sea único e irrepetible. Consta de tres partes, el jubón, solapa cuadrada unida al huipil o hipil; el huipil que es el vestido blanco, suelto y hasta las rodillas; y finalmente el fustán, tipo “enagua” larga y amplia sujetada a la cintura y que va debajo del huipil. Las tres partes sobresalen por los bordados de diferentes flores que armonizan las tres partes.
Autor: Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera. Fecha de publicación, 22 de mayo de 2019