Preparado a base de cacao y maíz, el tejate es algo más que un aperitivo refrescante, es parte de la base cultural y económica en el municipio de San Andrés Huayapam, en el valle oaxaqueño.

Denominada como “la bebida de los dioses”, la receta del tejate incluye una flor especial proveniente del árbol de “Rosita” que crece en forma natural en Huayapam, municipio de los Valles Centrales, Oax.

El maíz se hierbe con ceniza de leña y es parte importante de la masa nutritiva que resulta de tostar y moler otros tres ingredientes: cacao, la flor del rosita y el hueso del mamey.

Una vez obtenida la masa de cacao y maíz, se coloca en un cazo de barro verde en el que se adelgaza la mezcla paulatinamente con agua, mediante la acción manual de la mujeres que lo preparan; el azúcar es añadida sólo al momento de beber el téjate.

Al término de la preparación, la masa suelta una especie de espuma en la que se concentra una parte de las propiedades de la bebida refrescante y donde toma el color del cacao.

El tejate, es especialmente elaborado en San Andrés Huayapam, donde al menos 120 mujeres viven de su venta, así como de hacer empanadas y memelas, dentro de otros platillos locales y donde los clientes llegan con sus hijos y hasta con sus nietos para probar su tejate.

En Huayapam, anualmente los pobladores realizan una feria entorno al tejate que reúne la sazón de las mujeres que se dedican a su elaboración.

Esta antigua bebida es heredada de generación en generación para gusto de propios y extranjeros que pueden encontrarla en los principales mercados de las comunidades más grandes de los Valles Centrales de Oaxaca.

http://www.sinembargo.mx/16-09-2013/755748

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