Reserve cinco minutos antes de comenzar el día para respirar lenta y profundamente. Piense en el día que le espera, por lo que está agradecido y las personas en su vida.

De camino a la escuela, enséñeles a sus hijos a usar ejercicios de respiración para ayudarlos a prepararse para el día que tienen por delante. 

Disminuya la velocidad de la respiración inhalando durante cuatro segundos y exhalando durante seis segundos. Esto activa la parte del sistema nervioso que nos calma.

Elija música relajante para escuchar en su camino hacia y desde el trabajo o la escuela.

Dedique unos minutos después del trabajo a prepararse para la transición a casa.

Ponga a descansar los problemas no resueltos en el trabajo y cambie su enfoque a su familia.

Mantenerse activo,  el ejercicio regular es bueno para su salud física y emocional.

No beba alcohol, el alcohol es un sedante natural. 

Deje de fumar. 

Deje la cafeína. 

Consuma una dieta saludable.